¿Os
habéis preguntado alguna vez, por qué si se os rompe un vaso, copa
o cristal de ventana no se debe tirar al contenedor verde del vidrio?
¿Os
habéis preguntado por qué si tenéis un juguete de plástico viejo
o una lámpara de plástico o usa silla de plástico que queréis
tirar, no se debe poner en el contenedor amarillo ni el verde?
¿Qué
clase de reciclaje es ese que rechaza esos residuos, perfectamente reciclables, igual que una botella?
¿Cómo
es posible que una lata de atún, una de cerveza, una botella de agua
mineral o un brik de leche o zumo vayan al mismo contenedor
amarillo?
¿Nos
hemos vuelto locos o qué?
Las
respuestas a estas preguntas son largas y complicadas pero intentaré
dar una respuesta simple y breve.
En
primer lugar, el sistema de recogida y gestión de residuos no
obedece a ningún criterio de preservación del medio ambiente sino a
los intereses de un amplio sector político e industrial de nuestro
país.
La
gestión de residuos debería estar basada en el principio de las
tres “R”: reducción, reutilización y reciclaje. Y por ese orden
de prioridad. Pero a la industria y a los políticos no les interesa
que haya reducción de residuos porque ellos ganan generando residuos
(bolsas, botellas, materiales e un solo uso, etc.) y ganan
recogiéndolos y “reciclando”. Algunos ganan mucho. Y los
ciudadanos les hacemos una gran parte del trabajo, separamos, ponemos
en el contenedor y pagamos tasas desorbitadas de basura para que
hagan, no una, sino 5 recogidas de basura (papel, vidrio, envases,
orgánica y restos). Y algunos políticos reciben suculentas
comisiones de las empresas de gestión de basuras que financian a
algunos partidos, “el 3%”. Nos la meten doblada y además nos
hacen el chantaje de que “es por el medio ambiente”; ¡Y un
cuerno!, vamos a ver un poco más de detalle
Las
tres “R”
¿REDUCCIÓN?
No me hagas reír. ¿Cómo van a reducir una cosa que genera un
negocio descomunal?: fabricar grandes cantidades de productos con
envases superfluos que acaban en el cubo: todo tipo de envases,
bolsas, latas, botellas, bandejas de porexpan, bricks, embalajes,
etc. Además se genera el negocio de la recogida y el supuesto
tratamiento del residuo. Todo ello pagado por el usuario. Esta sí
sería una medida buena para el medio ambiente, la reducción.
¿REUTILIZACIÓN?
¡¡¡ Por favor !!! ¿Cómo vamos a reutilizar una botella de
cerveza? El “progreso” consiste en envases de usar y tirar.
Aunque se pudiesen reutilizar, eso no es moderno; es volver atrás en
el tiempo. Bien, pues esta sería otra buena medida para el medio
ambiente: que los residuos generados puedan ser reutilizables (no
“reciclables”, no confundamos)
¿RECICLAJE?
Bien, si se reciclaran los residuos, está sería una opción válida.
La peor de las tres, pero válida. Lo malo es que no se recicla más
que una ínfima parte de los residuos porque los productores de
residuos, las administraciones y los gestores de residuos pasan la
responsabilidad al usuarios para que separe los residuo y se los
entregue a ellos ya clasificados. Todo “por el medio ambiente” …
Ellos generan la porquería y luego te chantajean moralmente con lo
del “medio ambiente” para que les hagas el trabajo que es
responsabilidad suya.
El
reciclaje es pues la peor opción de gestión de los residuos, sólo
por delante del vertido incontrolado.
El
Sistema actual
Entonces
. ¿por qué tantas campañas para fomentar el reciclaje y el respeto
al medio ambiente?. Pues porque eso es un gran negocio, con grandes
beneficios para algunos y que pagamos ente todos
OTRA
SOLUCIÓN
Existen
muchas. Como favorecer legislativamente la reducción de residuos y
penalizar los excesos de residuos.
También se tendría que favorecer la reutilización de aquello que pueda ser reutilizable: botellas, por ejemplo
También se tendría que favorecer la reutilización de aquello que pueda ser reutilizable: botellas, por ejemplo
Por
último, basta darse una vuelta por alguna de las ferias de medio
ambiente serias, de carácter internacional (Munich, por ejemplo, no
las numerosas ferias-chapuza nacionales) que sean algo más que un
escaparate para vender barredoras y contenedores. En ellas podremos
ver maquinaria capaz de separar, de entre la basura, las diferentes
fracciones (vidrio, papel, metales, etc.) y generar prácticamente
ningún residuo que no sea aprovechable. Y eso con un solo
contenedor, todo mezclado, y una sola recogida.
Entonces,
¿porqué no se aplica esa tecnología?. Muy sencillo: es más barato
y el negocio bajaría su facturación.
Y
el 3% de esa facturación también sería menor.
Y
los únicos que ganarían serían los ciudadanos. Y eso no interesa
EN RESUMEN
El sistema actual de "reciclaje" no está hecho para beneficiar al medio ambiente sino todo lo contrario y sólo beneficia a las empresas gestoras de los servicios y a otros que no voy a nombrar y que reciben el 3%, como mínimo.